jueves, 10 de julio de 2014

Fukushima 4. Conclusión. Fotos y texto: SACASAS






Fukushima 4. Conclusión


Para terminar con el tema que ya lleva cuatro capítulos analizaremos primero el peor de los escenarios posibles (que esperamos no se produzca nunca) y sería que, por algún motivo (pueden haber varios), la radiactividad en el entorno de la planta subiera a niveles tales que ningún humano pudiese acercarse y por consiguiente las labores de refrigeración y desmantelamiento no pudiesen efectuarse. Quedarían abandonados a su suerte no sólo los 4 reactores afectados sino también los dos de Fukushima-Daini (los afectados son Fukushima-Daichi) que están a 10km, de suceder esto la cantidad de radiación liberada obligaría a evacuar 200km a la redonda incluyendo a Tokio, lo que sería una catástrofe de proporciones inimaginables que pondría en duda, incluso, la existencia de la nación japonesa. Ni la vida del planeta ni la del hemisferio norte (como pretenden algunos) estarían seriamente amenazados en el sentido de hacerse invivible, los niveles de radiación de fondo seguirían subiendo como lo hacen desde el comienzo de la era Atómica pero no superarían –todavía- al límite considerado como aceptable, que probablemente no es inocuo pero sí muy difíciles de medir sus consecuencias en la salud. Recordemos que hablamos del peor caso posible y suponemos que no se llegará a esos extremos.
 Tratemos de imaginar ahora el futuro suponiendo que las condiciones de empeoramiento del problema se mantengan como ahora, moderadas, para calificarlas de alguna manera aunque en realidad no hay nada moderado en un accidente nuclear. La acumulación de agua  contaminada seguirá y seguramente se tendrán que lanzar muchas toneladas al mar, esperemos que debidamente filtradas para minimizar el daño. El nivel general de radiación  de la planta continuará subiendo lentamente por las fugas tanto de radiación como de agua contaminada con la esperanza de que no traspase los límites vitales y permita continuar los trabajos de desmantelamiento.






Se habla de 40 años para el total desmonte de la planta, pero eso sería si de aquí a allá se logra desarrollar una tecnología que permita extraer los “corium” fundidos, de lo contrario, habrá que construirles unos sarcófagos similares a los de Chernobyl  y dejarlos allí para siempre.
Después del accidente ucraniano se habló de la necesidad de desarrollar robots apropiados para atender estas emergencias y no arriesgar vidas humanas. La explicación occidental atribuyó a la burocracia soviética el desastre, afirmando que algo así no ocurriría jamás en el ‘mundo libre’. El caso es que las lecciones no se aprendieron y hoy, no hay robots adecuados para estas labores; sólo nos resta esperar que esta vez sí se tome seriamente el asunto, porque no podemos estar cada tanto subiendo el nivel de radiación de fondo del planeta y llenándolo de regiones invivibles.

Sacasas

 

  Link Fukushima 1: http://gasasol.blogspot.com.es/2014/06/fukushima-parte-1-e-imagenes-sueltas.html
Link Fukushima 2:http://gasasol.blogspot.com.es/2014/07/fukushima-2-que-sabemos.html

Link Fukushima 3:http://gasasol.blogspot.com.es/2014/07/fukushima-3-lo-que-no-sabemos-fotos-y.html



P.D.Las imágenes no necesariamente tienen que ver con el artículo.





























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