Hoy un minicuento escrito por allá en el 79 acompañado de imágenes al azar.
El navío
Rifadas las
gavias y la mayor parte del velamen la embarcación navegaba a remolque de un
par de foques persistentes. El temporal, sobre una mar plena de espumas y color
aceite, se alejaba por estribor y el sol, a babor, comenzaba a pintar de tonos
infernales la negritud de la tormenta.
Una vez
amainaron los elementos y aparejada la única vela disponible la nave, retomó el curso de las olas enrumbándose hacia
su mítico destino. En lo alto de la cofa entre los restos del trapo destrozado,
el vigía valiéndose de una lente de varias fases dimensionales escrutaba el
horizonte sin hallar nada de interés.
Quince días
más habrían de sumarse a los largos meses de ignotas singladuras, escasos de
agua y alimentos en un barco apenas gobernable…….. Y una tarde de sol
esplendente desde lo alto de la arboladura se escucharon voces de avistamiento,
por proa cayendo a estribor.
La mar, como
detenida por una fuerza misteriosa formaba una pared y terminaba junto a las
estrellas. El bajel empujado con suavidad por un viento tibio saltó con
elegancia al vacío. Había llegado al fin del mundo………
Nov. 1979.
Bogotá.
Por si acaso,
aquí un pequeño glosario.
Glosario
Gavias: Tipo
de vela
Foque: Velas
triangulares delanteras ligadas al bauprés en proa.
Cofa:
Canasta en lo alto del palo mayor donde se ubicaba el vigía.
Singladura:
Distancia recorrida por el barco.
Estribor:
Derecha.
Babor:
Izquierda.
Arboladura:
conjunto de palos de los veleros.